¿Quieres experimentar una elevación natural de éxtasis, amor y felicidad 8 veces (¡o más!) más fuerte que un orgasmo? Prueba un parto fisiológico, sin medicación y sin distracciones.
Un estudio de 2013 examinó a 206,000 partos y descubrió que alrededor del 0.3% de las mujeres que dieron a luz experimentaron un orgasmo durante el parto.
Entonces, ¿cuál es el secreto para experimentar este tipo de parto extático? Si bien no hay una respuesta sólida sobre por qué ocurre para algunas mujeres, hay muchas similitudes entre los orgasmos y el parto.
Una madre en trabajo de parto debe sentirse libre de moverse, respirar, hacer sonidos y cambiar de posición según su cuerpo le indique instintivamente.
Créditos de las fotos: ColƄy Tulachanh
La oxitocina y las eta-endorfinas son nuestras hormonas de amor, felicidad, éxtasis y trascendencia (respectivamente) y son algunas de las hormonas clave en ambos sexos y nacimientos.
Las beta-endorfinas también activan el sistema de recompensa y placer de la dopamina mesocorticolímtica, que libera opiáceos naturales en el cerebro y hace que la experiencia sea intensamente placentera y adictiva, en un sentido positivo.
Alrededor del orgasmo, los niveles de oxitocina en las mujeres generalmente se duplican, aunque esto está influenciado por múltiples factores, como la fase del ciclo menstrual y el número de orgasmos. Curiosamente, se ha demostrado que cuanto más altos son los niveles de oxitocina, ¡más fuerte es el orgasmo!
En un parto fisiológico sin medicación, sin perturbaciones, los niveles de oxitocina aumentan de manera constante a lo largo del parto. Los niveles de oxitocina se elevan unas 3 o 4 veces más de lo normal durante el pujo, y se ha demostrado que también se elevan para el bebé.
Sin embargo, en la hora más o menos después del nacimiento, se ha demostrado que los niveles de oxitocina están elevados alrededor de 10 veces de lo normal: ¡el pico de oxitocina más alto de toda nuestra vida!
Créditos de las fotos: Siмplisti Cholistic Photography
Este pico de oxitocina después del nacimiento va de la mano con un período muy especial llamado “hora dorada”, un período mágico en el que nosotros y nuestras parejas nos enamoramos profundamente el uno del otro.
La oxitocina también activa los mecanismos instintivos de crianza/cuidado y cariño, y es intrínseca al proceso de lactancia (junto con la hormona prolactina).
El nacimiento está diseñado para ser una experiencia fortalecedora, exultante y positiva. Cuando seguimos nuestra huella hormonal ancestral de birth, maximizamos el placer, la comodidad y la seguridad, y minimizamos el dolor y el miedo….
Fuente: pregnantvideo.net